Consumidores

¿Cómo serán las compras en un futuro?

2018



La transformación digital es un hecho en muchos sectores como puede ser el retail. Las tiendas físicas tienen que adaptarse a los nuevos consumidores y una de las maneras es gracias a las nuevas tecnologías: probadores inteligentes, tiendas sin cajas para evitar largas colas, lineales inteligentes, robots, etc. Al final lo que importante es encontrar la manera de diferenciarse de la competencia y ¿cómo conseguirlo? Creando experiencias únicas para el cliente gracias a la inteligencia artificial. Inditex se ha dado cuenta de esta revolución digital y por este motivo ha decidido abrir una tienda física de Zara en la que solo es posible comprar de manera online aunque de momento será de manera temporal.

La tienda de 200 metros cuadrados se ubica a las afueras de Londres, en el centro comercial Westfield de Strasford y es una puerta hacia el futuro del comercio. El novedoso establecimiento expone una pequeña parte de la colección de Zara y de esta manera permite al consumidor poder ver las prendas físicamente pero solo es posible comprarlas a través de la web oficial ya que no dispone de probadores ni de cajas.

Una vez tramitado el pedido, el cliente puede recogerlo en la misma tienda o realizar cambios y devoluciones. Se trata de un escaparate, una pequeña ventana a la tienda digital de Zara en la que se mezcla la compra online y física. Una de las mayores novedades de esta tienda son sus espejos pantalla ya que enseñan cómo quedan las prendas expuestas en tienda y ofrecen maneras de combinarlas. Es decir, una vez se escoja una prenda, gracias a un sistema de identificación por radiofrecuencia el espejo identificará la prenda y emitirá sugerencias al cliente que se acerque.

El resultado y objetivo de este nuevo tipo de comercio es el ahorro de tiempo para el consumidor y la automatización del proceso de compra a través de cajas de auto pago. De momento, es la única que funciona de esta manera aunque, está claro, que si el experimento es un éxito la marca terminará implantándolo en otros puntos de venta y quién sabe si otras marcas también apuestan por este tipo de comercio. Es una manera práctica para el consumidor y además siguen existiendo las tiendas físicas para poder ver y tocar las prendas. La tecnología debe ser un amigo del retail y trabajar conjuntamente para crear una experiencia inolvidable para el cliente.