Compartir para competir

La crisis nos ha llevado a analizar el sector. Revisar todo lo que habíamos acumulado hasta ahora. Revolucionar e incluso cambiar cosas.

Llevamos meses intentando entender este nuevo mundo del retail en el cual lo digital gana terreno, el mundo online crece exponencialmente y los consumidores se balancean entre la crisis y el consumo.

Y todo parecía apuntar a que el cambio está siendo drástico. Que el mundo del retail mañana será irreconocible. Que está yendo a toda velocidad. Y en medio de tanto cambio, hemos encontrado esta interesante reflexión de Silvio Elias para el diario Expansión en la que dice lo siguiente:

Es sabido que el descenso continuado de la renta familiar disponible- el dinero que quedan en casa para gastar- ha provocado estos últimos años una fuerte caída del consumo. Este descenso impacta directamente a las ventas de las empresas de comercio, así como a su capacidad de acceder al crédito. Lo que cuesta más de ver, sin embargo, es que no todas las dificultades que sufre hoy el sector del retail se deben a la crisis y sus consecuencias.

Muchos ciudadanos, o consumidores como los llamamos en el sector estamos modificando nuestras actitudes y conductas de consumo. Ante esta situación, podemos pararnos y dar por buena la explicación que dice que el consumidor se ha vuelto más racional y que pone el precio por encima de todo. Así que todos deberíamos dedicarnos a bajar los precios y reducir los márgenes. Pero también podemos hacer una segunda lectura complementaria si queremos: buena parte de los consumidores sigue siendo tan emocional como antes, pero la diferencia radica en que sus emociones se encuentran dirigidas hacia nuevos valores emergentes, distintos de los anteriores. De esta segunda interpretación surgen los grupos de consumidores conocidos como millennials o echo boomers, los cuales se dice que hay más de 8 millones en España y que representan las futuras generaciones de consumidores. Aquí también podemos incluir el fenómeno del collaborative consumption y las empresas innovadoras que están proliferando bajo este concepto. Por lo tanto, vivimos momentos fascinantes para el retail, con cambios en las reglas del juego. Y cuando cambian las reglas del juego, hay al menos dos
consecuencias: la primera, que se abren un montón de oportunidades, y la segunda, que podemos elegir ser protagonistas.

En Comertia comprobamos cada día que el intercambio de experiencias y de conocimientos entre las empresas que formamos parte nos ayuda a detectar y valorar estas oportunidades dos con más optimismo y confianza en retos tan actuales como la transición del retail el canal online, y tan vigentes como los procesos de internacionalización. Juntos, trabajamos en el gran valor diferenciador y en la singularidad de nuestras marcas comerciales, que contribuyen a configurar el modelo del de comercio que tenemos. Y de la misma manera que practican el collaborative consumption. Ponemos en marcha también un proceso de collaborative competition. Lo que la gente de aquí llamamos compartir para competir.

Y es que todas las empresas tenemos sueños. Y estos sueños son fundamentales, porque lo que soñamos es lo que a menudo acabamos siendo.

Fuente: Expansión 27 de Junio de 2013.