Sephora y la tienda 3.0.

La cadena de cosmética y perfumería francesa Sephora se ha atrevido con el formato de tienda 3.0. Su tienda-laboratorio está en Paris y abrió sus puertas a finales del mes pasado. Vamos a entrar.

Su superficie es de 130 m2 lo que supone un espacio pequeño respecto al estándar de sus puntos de venta convencionales. En este espacio comercial se exponen más de sesenta marcas y 5 000 referencias que se completan con todo el resto disponible únicamente por el canal digital. Y es gracias a este canal complementario que un espacio tan reducido como el de esta tienda de Sephora puede permitirse ofrecer 150 marcas y 14 000 referencias de producto.

Al entrar dos robots nos dan la bienvenida. Ambos van vestidos con los colores corporativos de la marca retail, blanco y negro, e invitan a los clientes a coger una cesta para empezar sus compras. La cesta, evidentemente, es totalmente virtual y en cambio cada consumidor se pasea con una tarjeta NFC. ¡Aun así, hay unas cestas a disposición, nunca está de más! Los consumidores pueden ir de compras seleccionando los productos desde los paneles publicitarios que se van encontrando en la tienda.

Cuando nuestra cesta digital ya empieza a estar suficientemente llena o ya no queremos seguir comprando, pasamos por caja para pagar tanto los artículos de nuestra cesta virtual como los de nuestra cesta de 'toda la vida'. En la caja, que es estática o puede hacerse a través de un equipo de vendedores que se pasean por la tienda, el cliente escoge el método de pago con el que quiere finalizar sus compras. La entrega de la compra puede hacerse en la tienda o en el domicilio del consumidor.

La tienda está equipada de numerosas pantallas táctiles que guían al consumidor a obtener más información sobre los productos que les interesan. Algunas de estas pantallas están conectadas con las redes sociales y a otros canales de comunicación. El consumidor puede hacerse una foto con su nuevo maquillaje y enviarla por e-mail a quién quiera.

A este Sephora original y novedoso lo han bautizado con el nombre de Flash, que quiere representar los atributos de rapidez, digital e innovación que ofrece esta nueva apuesta retail de la marca de cosméticos francesa.